Los tripoides son los elementos que conectan la caja de cambios con los cauchos del carro. Se ubican en la parte delantera y hay uno en la derecha como en la izquierda.
Los tripoides se encargan del movimiento generado por la caja de velocidades hacia las ruedas. De esta forma, el carro puede desplazarse sin ningún problema.
Los tripoides están sujeto a una gran fricción y calor, por lo que requiere contar con una buena lubricación, para mantener el traslado del vehículo
El tripoide consta de cuatro partes: primero están las puntas que van hacia el neumático, a estas se les conoce como junta homocinética. Luego, está la punta de acople que va hacia la caja de velocidades.
Las últimas dos partes son la barra de transmisión y el sistema de lubricación que se compone por los guardapolvos, las abrazaderas metálicas y la grasa.
¿Qué son los tripoides del carro y cómo mantenerlos en buen estado?
Para lubricar el tripoide y garantizar su buen funcionamiento y longevidad se deben seguir los siguientes pasos:
- Revisar el tipo de lubricación: de acuerdo a su diseño, algunos están sellados con grasa y otros requieren aceite. Para saber cuál utiliza el vehículo se debe revisar el manual donde estarán las especificaciones exactas.
- El acceso al tripoide: se debe levantar el carro con el gato y poner los soportes de seguridad, retirar el caucho puede dar un mejor acceso.
- Inspección visual: antes de lubricar el tripoide, es importante que el usuario revise si hay signos de desgaste, grietas o fugas en los retenes. En este caso se debe reemplazar la pieza.
- Limpiar el área: primero se debe limpiar el área alrededor del tripoide, para evitar que la suciedad entre en el mecanismo.
- Aplicar el lubricante: se puede utilizar una inyectadora de grasa para llegar directamente a la junta.
- Verificar el sello: después de lubricar la pieza es importante que el fuelle o las juntas estén bien posicionadas y selladas para evitar que la grasa se escape.
- Prueba de funcionamiento: ya hecho los pasos anteriores, el usuario debe realizar una prueba de manejo para asegurarse que no haya ningún tipo de vibración fuera de lo común y que todo esté en buen estado.
Ahora, como cualquier pieza de un carro, hay varias razones por las que un tripoide puede dañarse y deba ser reemplazado, estas son:
- Por su uso: el desgaste de un tripoide puede llegar a partir de los 150.000 km.
- A causa de un impacto: en caso de sufrir un accidente y que el impacto vaya a la zona de los cauchos es muy probable que el tripoide se vea afectado.
- Una mala lubricación: si la grasa, el guardapolvo y las abrazaderas están en mal estado, el tripoide tendrá un desgaste prematuro.
- Si se rompe el guardapolvo o las abrazaderas: esta es una de las principales causas de las fallas de esta pieza, ya que habrá un fuga de la grasa y pueden entrar suciedad o agua que causará el daño.
Si bien reemplazar el tripoide es un trabajo que puede hacer el usuario del vehículo, se recomienda que lo haga un profesional, ya que si estas piezas quedan mal posicionadas pueden hacer que la persona se quede accidentada.